Estamos habituados a ponernos gafas, lentillas, operarnos... cuando tenemos problemas de visión. Nunca nos han dicho que podemos dejar de perderla e, incluso ¡mejorarla! porque, en muchas situaciones, nuestros ojos están perfectamente
sanos; es el caso de personas con miopía, presbicia, hipermetropía...
Sus ojos están perfectamente; tan solo, están deformados o
requieren entrenamiento.